Cooking: aperitivo súper fácil y rico que no puedes dejar de probar…

     Es un hecho: vivo para el fin de semana. Espero el Viernes como al santo advenimiento. Soy de las que el Domingo les da un bajón del quince. Sin embargo, los Viernes es todo como wonderfuleiro y veo la vida modo Heidi-en-día-soleado-con-cabras-por-la-montaña. Aunque me tuvieran que hacer una colonoscopia un Viernes, lo preferiría a un Lunes sí o sí. En ese punto estamos.

     En serio os hablo, la semana me provoca una especie de desdoblamiento mental que según el día en que estemos me cambia la moral lo mismito que a un Gremlim en un buffet libre a las 12 de la noche. Y creo que no soy la única porque sino…a qué viene eso de la moda de los Juernes?? o Jovintxos?? o Juepinchos?? En cada sitio le ponen un nombre al tema. Me enteré de estas historias hace poco, no os voy a engañar. A menudo me entero de las cosas tarde…y mal. Según las fuentes consultadas (escasas pero fiables) me informan de que la gente ahora sale los Jueves. A mí eso, qué queréis que os diga, me  ha tocado el alma y me la ha dejado hecha trapos. Salir el Jueves??? WTF??? pero si yo no salgo ni los Sábados!! Dejando aparte mi nula vida juerguista y a riesgo de que, tras esta confesión, alguno me vea como un gusano de la peor especie…os cuento que lo del Juepincho ya me gusta más.

           «Juepincho: dígase de la costumbre de salir el Jueves antes de la cena a tomar un pincho.»

      A esto sí que nos hemos aficionado en casa. Porque, shhhhhhh…mirad, esto del Juernes no es más que una estrategia para adelantar el fin de semana. Olé!! Y con eso estoy más feliz que Mc Gyver en Leroy Merlin. De esta forma el Miércoles queda convertido en una especie de Viernes y, en consecuencia genial y dando un triple salto mortal, la semana ya sólo va del Lunes al Miércoles. Bravoo!!! Lo hemos conseguido. Y para animar un buen Juernes nada mejor que una tapa a su nivel.

     Lo que hoy os traigo es un aperitivo a modo de tapa que he descubierto yendo precisamente de Juepincho a un local del que te comerías la barra entera. Es fácil a más no poder y riquísima.

Ingredientes:

• pan de hogaza tostado
• aceite de oliva
• tomate natural con un toque de sal
• rúcula fresca
• boquerones en vinagre

     Lo montáis todo en este orden y listo!! En casa ha triunfado como la Coca-cola y yo creo que no va a haber comida familiar que se precie sin poner un plato al centro con esta tapa.

     La rúcula tiene un sabor potente y si no os gusta, podéis sustituirla por algún otro brote fresco tipo canónigos o lechuga de roble. Pero yo creo que el toque diferente a la tapa se lo da precisamente la rúcula. Aunque es fuerte de sabor, la tapa admite unas 5 ó 6 hojitas sin problema.

     En cuanto al pan, el que más me gusta para este tipo de tapas es el de hogaza tostado. Por su consistencia y porque, aún tostado, la miga no pierde elasticidad.

     Así que os animo a probarla en Juernes o en el día que queráis. Yo mientras tanto, voy investigando más estrategias para acortar la semana. O eso, o que me toque ya una Primitiva de 6 y viviré en un bucle de findes sin fin.

     Hasta el próximo post!!